viernes, 1 de julio de 2016

Guía para aprobar el verano escolar... con nota. Entrevista en Faro de Vigo


Comparto con vosotros/as la entrevista que recientemente  me ha realizado la periodista,  del diario "Faro de Vigo", Amaia Mauleón, con motivo del comienzo de las vacaciones escolares.

"El pasado, 22 de Junio llegó el gran día, las vacaciones de verano de los escolares. El largo período estival,  imposible de compaginar con las reducidas vacaciones de los padres trabajadores, pone a prueba la destreza de éstos para gestionar la forma más adecuada de organizar los más de dos meses y medio que tenemos por delante.

Psicólogos y educadores gallegos ofrecen unas pautas para que el verano sea aprovechado al máximo por los niños y disfrutado también por los padres. Mantener unos horarios, aunque más flexibles y enseñar sin necesidad de libros son algunas de las claves".




¿Es bueno premiar las buenas notas y castigar las malas? ¿De qué manera?

Lo prioritario no debe ser el premio o castigo ante las notas ni convertirlas en premios materiales, lo prioritario es trabajar la motivación y el interés por el aprendizaje en el día a día, si esto se logra el premio llega por sí mismo y repercute directamente en la autoestima del niño, él es el máximo beneficiario de sus logros. Debemos entender que el proceso educativo es un recorrido formativo, en el que cada etapa debe potenciar que el alumno/a se convierta en el sujeto activo de su propio aprendizaje.

Cuando llega el suspenso, padres y profesores debemos reflexionar en torno a las causas que lo han propiciado y adoptar aquellas medidas que contribuyan a una mejora en el rendimiento del menor. En ocasiones, las calificaciones escolares son un reflejo de la existencia de un malestar no siempre vinculado a un trastorno del aprendizaje ni a un posible déficit de atención. Es importante indagar las causas sin necesidad de poner en el centro de atención aspectos negativos del menor referidos a su personalidad, es un vago, no tiene interés, pasa de todo, es un desordenado, no se centra, etc

Como impulsora de la "Pedagogía Positiva", no creo en la eficacia de los castigos como un recurso educativo y con ello no quiero decir que exista impunidad ante las situaciones pero existen otras herramientas que pueden prevenir o mejorar conductas sin necesidad de utilizar la sanción. El refuerzo de conductas positivas, la negociación, la instauración de hábitos y rutinas entre otros, son recursos a nuestro alcance que sólo precisan cambiemos nuestro modo de entender la educación, la sanción elimina casi toda probabilidad de mejora y puede limitarse al cumplimiento de una norma por evitación no por aprendizaje.



Empiezan las vacaciones. ¿Desde el primer momento es bueno que los niños que sacaron malas notas comiencen a estudiar? ¿Cuánto tiempo al día?

El final de curso conlleva tanto para padres como para niños/as y también abuelos una re-adaptación de normas y horarios que puede originar inicialmente un poco de caos en la familia, es importante permitirse alrededor de dos semanas para establecer nuevas rutinas, horarios y organización del tiempo y el espacio. 

Es importante que los menores dediquen tiempo a la realización de tareas, no estudiar por cubrir horas, ni cediendo la responsabilidad como muchas veces ocurre, a los abuelos. Es importante la organización del tiempo y de los objetivos, los cuales aconsejo sean negociados con el niño para hacerles partícipes en las tomas de decisiones. Si hablamos de niños en etapa de Primaria, aconsejo realizar tareas, como pauta general, por un tiempo aproximado de 30-60 minutos y si hablamos de niños de Secundaria, 60- 90 min, después habría que atender a la situación personal de cada niño/a.

Y los que han aprobado todo ¿qué tiempo deberían dedicar a las tareas?


Estar de vacaciones no lleva implícito no hacer nada o que todo el tiempo se convierta en tiempo libre, es importante aprovechar estos momentos para implicar a los niños en diferentes actividades formativas y de ocio, y por poner un ejemplo es un buen momento para implicarlos en las tareas del hogar, independientemente del resultado académico.

Para aquellos niños que han aprobado, es altamente positivo generar espacios formativos durante el período vacacional, tiempos de lectura, realización de dibujos, etc, además de estimular la creatividad, favorecen el desarrollo cognitivo.

¿Es bueno que los niños ocupen todo su tiempo libre en campamentos? ¿Cuál es la mejor forma de elegir los más adecuados?

El juego, colectivo e individual, es fundamental en la vida del niño/a, tanto en tiempo escolar como vacacional el juego debe estar siempre presente. La asistencia a campamentos es una alternativa de ocio fantástica, potencia la autonomía y favorece la adquisición de habilidades sociales y conocimiento de las normas sociales. Una opción que no debe concebirse como la única opción durante todo el verano ¿Cuál es el mejor? Difícil establecer una pauta común, la oferta de ocio es muy variada. Lo importante es saber escuchar al niño/a y ofrecerle una alternativa adecuada a su momento, además de prestar atención a la actividad a realizar, debemos valorar  aspectos como si es buen momento para probar con un campamento con pernocta fuera de casa o de larga o corta duración. Mi recomendación es adoptar la decisión pensando en el interés del menor e intentar integrarlo, en la medida de lo posible dentro de la organización familiar.



¿Hasta qué punto es aceptable la relajación de rutinas y horarios?

Nuestros ritmos sociales son cada vez más altos y exigentes e importante es disfrutar de momentos de desconexión. El período vacacional de los escolares es más largo que el de las familias por ello es también importante que este tiempo no vaya unido a la omisión de rutinas y horarios. Los niños necesitan pautas y una vida ordenada mejora nuestro carácter, nuestra alimentación, favorece el proceso de sueño y vigilia, regula nuestra actividad entre otras muchas mejoras que podríamos continuar citando.

En verano, el peligro de abusar de los aparatos tecnológicos aumenta ¿Cómo evitarlos?

Una de las principales fuentes de discusión entre padres e hijos en la actualidad es el tiempo de uso de videoconsolas y teléfonos móviles. Estos dispositivos, y en una sociedad cada vez más tecnológica,  no son nocivos ni son una pérdida de tiempo, lo importante es formar en su uso, prevenir ante los riesgos que supone el uso indebido y regular los tiempos estableciendo horarios que permitan a los niños/as realizar otro tipo de actividades. Complementar su uso y no utilizarlos como herramienta de sanción es fundamental para no cerrar la puerta a la comunicación.

"Animo a las familias a continuar disfrutando del placer de educar desde los diferentes colores que la vida nos regala".