En este mes de Abril de 2017 e invitada por el AMPA del Colegio Alborada de la ciudad de Vigo he
impartido una "Formación sobre Acoso Escolar y Bullying" a dos grupos de alumnos/as. Un grupo
eran alumnos/as de 3º y 4º de Educación Primaria y un segundo grupo de de 5º y
6º de Educación Primaria. Un total de 150 personas con las que he podido abordar de manera directa y cercana este tema tan preocupante que además ocurre en un entorno de aprendizaje y convivencia.
Sorprende
observar como en el momento en que se les plantea que vamos a tratar el tema
del acoso escolar, las reacciones en ambos grupos son muy similares, levantando
la mano un número elevado del alumnado para comentar que ellos/as han sido víctimas de acoso escolar pero que ya todo se encuentra solucionado.
"Yo
he sido víctima de acoso escolar" así nos lo cuentan como así lo viven y es que además quieren alzar su voz y contarlo, me
escondían la mochila, me cogían mi estuche sin permiso, no me dejaban jugar en
el recreo, etc. Lo narran con la sensación de no haber sido escuchados en el momento en
el que se sentían mal y sienten que todo se ha solucionado en el momento en el
que sus padres han acudido a hablar con el centro escolar.
Sorprende
también el alto conocimiento teórico que poseen en relación al acoso escolar y
diferencian con mucha claridad un comportamiento o actitud positiva de uno
negativo, sabiendo cómo quieren tratar a sus compañeros y cómo quieren ser
tratados.
Si
esta realidad, en relación al conocimiento de lo que es acoso escolar y cómo
abordarlo, en una pequeña muestra de personas es así y parecen tenerlo tan
claro.
¿Por qué son tan altas las tasas de acoso escolar?
Estamos hablando
que en el año 2016 las estadísticas en Galicia sobre acoso escolar nos indican que lo padecen en torno a un 20% del alumnado.
La
visibilidad por parte de los medios de comunicación están contribuyendo a su
mayor denuncia y al mayor conocimiento de las personas implicadas, esta misma
semana la Fundación Anar en colaboración con la Fundación Mutua Madrileña han presentado el "II Estudio sobre Acoso Escolar y Ciberbullying según los afectados" y sus estadísticas nos revelan cómo ha evolucionado el nivel de conocimiento
en torno a profesores, padres y espectadores y sorprende el dato en relación al
profesorado. En 2015 el conocimiento de los profesores era de un 3,9% y este año
2016 ha ascendido hasta un 74,7% y en el caso de los padres nos cuentan que si en
2015 era de un 5,2% en el 2016 ha sido de un 20,6%. Si hablamos de las personas consideradas espectadoras el 2015 nos habla de nivel de conocimiento de un 5,2% y el 2016 ha ascendido a un 15,2%.
Este incremento de la visibilidad tiene sus
aspectos positivos y así también nos lo cuentan las estadísticas pero...
CUIDADO! para mí hay un aspecto negativo que nos puede hacer perder el foco en
el verdadero conflicto, no todo es acoso escolar y esto nos puede conducir hacia planteamientos erróneos en los que las
verdaderas situaciones de acoso no sean igual de visibles y se pierdan dentro
de todo el amasijo de situaciones cotidianas a escuchar e investigar. La realidad nos habla de que en algunas ocasiones se está haciendo necesaria la intervención de la policía y guardia civil en la primera fase de investigación del proceso, situación que no debe ser vista como algo negativo pero que tampoco debiera convertirse en un habitual, cada persona dentro del proceso educativo e igualmente en la enseñanza tiene su rol en función de su formación.
Retomando
mi experiencia en este aula, aportar como dato importante que se establece el
patio como el espacio en el que más situaciones de acoso escolar e indefensión
se producen en el entorno escolar, un momento de distensión en el que las
normas cambian, las relaciones personales van variando, los roles de cada
alumno/a cambia y el número de personas que confluyen en un mismo espacio son
muchas y diferentes. En este espacio, el alumnado vuelve a sentirse indefenso
sin sentir que a su alrededor hay figuras de referencia que pueden ayudarles a
gestionar los conflictos que surgen en este tiempo de ocio, juego y diversión.
En Galicia, los profesores realizan guardias en los tiempos de recreo y como
dato podemos aportar que la ratio es de 1 profesor por cada 50 alumnos.
Con
este post hoy no deseo teorizar ni hablar de los diferentes protagonistas del
acoso, os invito a leer este otro post donde sí he abordado este tema desde su definición y avanzo que muy pronto
volveré a escribir sobre acoso escolar tras mi participación ayer sábado en las II
Jornadas sobre Acoso Escolar y Bullying en la localidad de Vilagarcía de
Arousa, jornadas organizadas por la Asociación TDAH Salnés bajo el lema
"Alza a túa Voz".
Hoy quiero animar a la reflexión del adulto, padres,
madres, profesores y profesionales de la educación, existe violencia en las
aulas, violencia promovida por niños y niñas, seamos conscientes que el
problema lo tienen los niños/as por las situaciones vividas y las consecuencias de ello derivan pero estos problemas no los generan ellos, los genera el tipo de educación que reciben.
¿No será que están
reproduciendo nuestra sociedad y nuestros modelos educativos y nuestras pautas
de conducta?
El
acoso escolar es un reflejo de nuestra sociedad, una sociedad en la
que la violencia está presente, a diario vemos violencia en los medios de
comunicación, hablamos de violencia de género, violencia de hijos/as a padres
(Síndrome del Emperador), violencia de padres a hijos, violencia de padres a
profesores y también violencia de profesores a padres...
¿Existe
la posibilidad de promover el cambio?
El
cambio se encuentra en la EDUCACIÓN, no me cansaré de comunicarlo, escribirlo y seguir dotando de herramientas a todas aquellas persomas interesadas en promover el cambio.
Hoy te invito a ti... a reflexionar y comenzar a trabajar desde la prevención y desde la resolución de conflictos, resolución de conflictos que eviten que encontremos en la violencia una forma de lograr
nuestros fines como persona y una defensa de nuestros derechos y que así como padres eduquemos a nuestros hijos/as y como maestros/as enseñemos a nuestros alumnos/as.